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ELLAS SON LAS KELLYS Y TU TAMBIEN PODRIAS SER UNA, MUJER EXPLOTADA Y OPRIMIDA ¿NOS ORGANIZAMOS? Marisa Doménech - De La Plaza Incendiada Alrededor de 200.000 mujeres en España viven una situación dantesca desde el punto de vista de la opresión que marca la lucha de clases. Se trata del colectivo de las camareras de piso y otras mujeres auxiliares. En un par de años o tres han pasado de ser invisibles a organizarse como asociación, esto es, Las Kellys es la Asociación Española de Camareras de Piso. ¿Alguno de vosotros/las conocíais hace un par de años? ¿Habíais oído hablar de estas mujeres y su lucha reivindicativa hasta hace poco? Lo realmente positivo y esperanzador de una lucha es cuando ésta se viraliza y se va convirtiendo en unitaria y se suma a otras o unifica realidades laborales en otros sectores similares. Pero lo primero, adquirir autonomía reivindicativa reclasificándote dentro del sector en el que se trabaja aspirando a una vida mejor. Ellas, sin ser obreras y trabajar en una fábrica, pertenecen a un convenio donde imagino que la sindicación es difícil sino imposible por categorización laboral y por otras muchas cosas. Ahora entraremos de lleno en esos temas. El fenóneno Kelly es ya una realidad. Blanco y en botella. Es innegable. Incluso gracias a su persistencia han logrado que durante la anterior legislatura de Rajoy, éste las recibiera en la Moncloa. Ello ocurrió el pasado 5 de abril, donde consiguieron reivindicar oficialmente, vamos a decirlo así, en lenguaje parlamentario y dentro de ese marco, la lucha por sus derechos sociales, económicos, laborales, financieros. Y no olvidemos que es un tema político, como lo fue y lo sigue siendo, aunque ahora menos debido a la reconversión industrial, la lucha de los mineros de Asturias, los trabajadores de Bosal en Puerto de Sagunto, ahora mismo la de Fuenlabrada y CocaCola en Lucha, los compañeros de Iberia (se la quedó, como sabéis, la British Airways por cuatro duros) y tantos otros grupos y colectivos en situación de explotación extrema, despidos de una gran parte de la plantilla, suspensión de pagos, cierre de instalaciones, externalización laboral, empresas y multinacionales en situación de concurso de acreedores, ERES encubiertos, la opresión que viven los mismos camareros/as en la hostelería, el sector del taxi donde hemos asistido a la unidad de todos ellos en huelga en toda España hace nada porque la UE tiene como objetivo dentro del sector su liberalización y la entrada en él del gran capital extranjero, etc. Asi pues, contaros como anecdotario que la recepción con Rajoy fue por presión, forzosa. Ellas piden a grosso modo cambiar la legislación laboral para la mejora de sus condiciones de trabajo, precisamente, la senadora de Nueva Canarias es hija de una Kelly, Maria José López. Se atrevió a hacer una interpelación en la cámara, ante Rajoy, en vísperas de la extraordinaria y multitudinaria huelga de mujeres del 8 de Marzo. Evidentemente, hubiese sido demasiado impopular que el presidente del Gobierno se hubiera negado a recibirlas, debido a dos condicionantes totalmente limpios, transparentes y que, de hecho, van a seguir siendo irreversibles: el avance del movimiento popular y junto a él y dentro de él, también en sí mismo, la importancia que ha alcanzado la lucha del Movimiento Feminista. El segundo factor, la repercusión que ha tenido antes y después el 8 de Marzo en España y en otros países, es decir, a nivel mundial. Un hito histórico. Y las Kellys, un ejemplo a seguir. Las Kellys es una asociación autónoma que apuesta por la autoorganización. Está integrada por camareras de piso y por familiares y amigos de éstas y que exigen, aparte de otras reivindicaciones, derechos fundamentales y laborales como: - La modificación del artículo 42 del Estatuto de los Trabajadores para acabar con la externalización del sector. Externalización: la precariedad laboral que supone la subcontratación por otra empresa que puede estar incluso desligada del sector donde se ubican los trabajadores, en principio u originariamente contratados o no por su propio monopolio, empresa, pyme o multinacional. Suele suceder en las grandes empresas o multinacionales, por lo general. La misma empresa originaria puede ocultar o minimizar esta práctica de explotación empleando eufemismos. Uno de ellos está muy de moda y no refleja para nada el término explotación, sino que lo edulcora y prelegaliza, aunque la misma práctica sea ilícita: "outsourcing". Las estadísticas señalan que el 90% de las empresas recurren a esta forma de explotación encubierta. Solo que hay que distinguir entre una pequeña o incluso mediana empresa, de carácter familiar o no, de una multinacional, gran empresa o monopolio porque la frecuencia ni el peso es el mismo, como sucede de manera recurrente en una multinacional como la Ford, por citar un ejemplo, además de capital norteamericano. A estas trabajadoras las pueden cambiar de empresa, ser subcontratadas por cualquier empresa rebajando sus condiciones laborales y ser trasladadas sin motivo aparente de localidad, de dueño empresarial, etc. - El blindaje de los convenios de Hostelería. Con enorme precisión, el gobierno de turno en 2012 en su reforma laboral, la de Rajoy, eliminó los convenios colectivos poniendo por encima el criterio de los convenios empresariales. Así pues, y en aras de aprovecharse de la situación, las empresas de subcontratación (no existen solo las famosas ETT) imponen unas condiciones draconianas y rebajan los derechos adquiridos o que ya se tenían gracias a las luchas del pueblo trabajador y de los obreros, mantenidas durante largo tiempo desde sus victorias, algunas de ellas, históricas. Pero como antes he señalado, muchas de estas trabajadoras ultra explotadas, no solo en situación de precariedad, no están adscritas a ningún convenio ni sindicadas. Esos mismos derechos ganados en el tiempo y con sangre, del que todavía disponen otros sectores, también en lucha, ni siquiera las limpiadoras de hotel lo disfrutan. Trágico. No solo para ellas, también para sus familiares, muchos de ellos niños. Porque son trabajadoras y madres. - Subida salarial: una camarera de hotel cobra de media no más de 2'50 por una habitación que debe estar al final del tiempo disponible impoluta. El tiempo del que disponen está programado a destajo. Tantas habitaciones en tanto tiempo, si no, te despido. Hay otras como tú que seguro que cumplen. Eso es lo que vienen a demandar los directores de hoteles donde un cliente puede llegar a pagar cifras astronómicas por pasar una noche, aun cuando la cantidad no sea tan desbordante pero sí importante, como una noche de asueto por 300 euros. La mayoría de ellas tienen contratos mensuales o semanales, la escasísima temporalidad es un factor de riesgo laboral y personal, así de claro. Insalubre e incompatible con la vida. Solamente por citar un solo aspecto de los brutales descensos de derechos sociales que dirigen el sector más precario en cuanto a contratación se refiere. No estamos hablando, por ejemplo, de las cuidadoras a tiempo completo a domicilio, que también merecerían un capítulo aparte. Porque muchas de ellas ni siquiera tienen seguridad social, su trabajo depende en el mayor de los casos, de que la persona a su cuidado, el dependiente, viva muchos años. La relación con el entorno laboral suele ser familiar y endogámica, por tanto, subjetiva. Un caso concreto deleznable es lo que contaba una Kelly cuando el jefe o gerente de un hotel las felicitaba porque había alcanzado un monto de ganancias de 600.000 euros. Vergonzoso, teniendo una cuenta de beneficios que alberga una cantidad de tal calibre y donde la forma de gestionar el trabajo de sus empleadas como tónica general sea la hiperexplotación. Sobre la base de la explotación del modelo actual: trabajas muchas horas muy mal remuneradas con rebaja de derechos laborales y no llegas a fin de mes. - Reducción de jornada: Trabajan más de ocho horas y su salario neto suele oscilar entre los 400 y los 800 euros mensuales, esto último, con suerte y dependiendo de la empresa contratante o subcontratante, gracias de nuevo a la reforma laboral que ha llegado a propiciar descensos en nómina de hasta un 40%. Y éste es un factor que se da de manera bastante generalizada, en otros sectores y categorías laborales. También puede ocurrir con independencia de las condiciones de un tipo de contrato indefinido dado, pues en estos casos también han variado las condiciones primarias establecidas por ley en años pasados. - Otras reivindicaciones son: jubilación anticipada, reconocimiento de trabajo penoso (por riesgo de enfermedad, por ejemplo, de estrés laboral...), también y desde ese punto el reconocimiento oficial a las enfermedades profesionales derivadas de su trabajo, relacionadas con el aparato motor y músculo esquelético. - Garantizar la igualdad de contratación, en función del art. 42 del Estatuto de los Trabajadores, e incorporar la Ley Kelly para impedir la cesión laboral de las trabajadoras, esto último tiene que ver con el punto que explicaba acerca de la externalización, es una de las medidas empleadas en esta práctica. - Que el INEM gestione la bolsa de trabajo. Debe de haber regularización por parte del Estado. Esta es su WEB -> https://laskellys.wordpress.com/ |
